Preparación:
Mezclar los ingredientes secos: En un bol grande, tamiza la harina y añade la sal (y el azúcar si lo usas). Mezcla bien.
Agregar los ingredientes húmedos: Haz un hueco en el centro de la mezcla de harina y vierte la manteca derretida, el huevo y la mitad del agua tibia.
Amasado: Comienza a mezclar los ingredientes desde el centro, agregando poco a poco el agua restante hasta formar una masa homogénea. Si es necesario, añade más agua o harina para ajustar la textura. La masa debe quedar suave pero no pegajosa.
Reposo: Coloca la masa en un bol, cúbrela con un paño y déjala reposar durante unos 30 minutos a temperatura ambiente. Esto ayudará a que se vuelva más elástica.
Estirar la masa: Divide la masa en porciones pequeñas (del tamaño de una bola de golf) y estira cada una con un rodillo hasta que quede fina (aproximadamente 2-3 mm de grosor).
Cortar los discos: Usa un cortador circular o un vaso para formar los discos de masa. El tamaño puede variar según prefieras empanadas grandes o pequeñas.
Rellenar y cerrar: Coloca una pequeña cantidad de relleno en el centro de cada disco, luego dobla la masa por la mitad y presiona los bordes para sellar. Puedes usar un tenedor para marcar los bordes o hacer un repulgue tradicional.
Para Empanadas Fritas:
Calienta abundante aceite en una sartén a fuego medio-alto.
Fríe las empanadas hasta que estén doradas por ambos lados (unos 3-4 minutos por lado).
Retíralas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Para Empanadas al Horno:
Precalienta el horno a 180°C (350°F).
Coloca las empanadas en una bandeja para hornear ligeramente engrasada.
Pincela las empanadas con huevo batido para que queden doradas.
Hornea durante 20-25 minutos o hasta que estén doradas